La puesta cuyo texto y dirección pertenecen a Patricia Casalvieri, encuentra en Isabel Quinteros y Alejandro Casagrande, el logro de un poema puesto en escena. Un poema en el que los Kilmes , pueblo desalojado de los Valles CalchaquÃes, narran su despojo y búsqueda de un mundo perdido.
Por Teresa Gatto
“Según las fuentes el kakán se hablaba en el valle CalchaquÃ, Catamarca, gran parte de La Rioja, parte de Santiago del Estero (la sierra y el RÃo Dulce) y norte de San Juan (rÃo Bermejo, Jáchal y Valle Fértil) (Barzana, Canals Frau 1951, Furlong, Espejo)...”
Sonidos que sólo pueden remontarnos a la tierra primigenia, aquella teñida de sangre por el conquistador, sonidos autóctonos que no por poco difundidos son menos pregnantes en en un imaginario que, aunque sea citadino, está en la sangre, no todes bajamos de los barcos o, no todes desconocemos las Crónicas de Indias y la matanza y desplazamiento de los verdaderos dueños de la Tierra, los pueblos Originarios.
Se reconocen como propios de la América conquistada a espada y fuego, Con esos sonidos comienza el rito de Luna Kakana, música que tiene Miriam GarcÃa en composición y ejecución. El minimalismo que propone el diseño de iluminación de Leandra Rodriguez deja siempre al contraluz a Isabel Quinteros que colma el escenario con su presencia espléndida y su decir magistral de un texto bellÃsimo y durÃsimo.
Su coprotagónico Alejandro Casagrande, parece reivindicar aquella disolución de lo propio. Es un hombre murciélago (metáfora de aquello que consideramos se alimenta de sangre ajena)
Ella, con un registro vocal perfecto para este texto se desplaza por el espacio escénico dando testimonio de lo añorado.
Pero, acaso ¿Alguien ostenta alguna duda?. No sólo por las Cartas de Relación que el Conquistador envió a España, sino porque aún hoy hay pueblos que luchan por recuperar o permanecer en su tierra, aquella tierra matricial que, no sólo es su cosmogonÃa sino que guarda los huesos de sus muertos.
Kakana, la luna, Kakán la lengua que no se deberÃa perder porque una lengua es un modo de ver el mundo.
Luna Kakana es una puesta en acto de las pérdidas de hace siglos, de cuando el mundo tal y como habÃa sido concebido fue arrasado por la Conquista, diezmado por enfermedades desconocidas en este Edén que era la América desde México hasta aquÃ. Hace 5 siglos que mirar hacia otros lares no sirve. Cinco Siglos Igual diriÃa León Gieco.
La única manera de conocer es conocer desde adentro. Nosotres también somos familia de aquellos que nacieron en los Valles CalchaquÃes. Somos el resultado de esa añoranza que Isabel Quinteros pone de modo magistral en escena y que Alejandro Casagrande niega o aminora con una empatÃa propia de un desclasado, expatriado o conquistador.
Tal vez, mirarnos de nuevo, otra vez, reflejados en este texto virtuoso nos permita entender las razones por las que no salimos del cÃrculo vicioso de la entrega y el menoscabo.
Reflejarse en estas actuaciones maravillosas y hacer su catarsis, si la necesita, por no haber entendido el despojo antes ni ahora.
Ficha ArtÃstico/Técnica
Autora: Patricia Casalvieri
Actúan: Alejandro Casagrande, Isabel Quinteros
Vestuario: Giselle Grieco Pesce
Músico En Escena: Miriam Garcia
Música original: Miriam Garcia
Diseño De Iluminación: Leandra RodrÃguez -Adea-
FotografÃa: Lorena Pérez
Diseño gráfico: Nahuel Lamoglia
Asistencia de iluminación: Tatiana Rulli
Asistencia de dirección: Ayelen Minervino, Nazarena Palacio, Marita Ruchti
Prensa: Ati Zarate
Dirección musical: Miriam Garcia
Dirección: Patricia Casalvieri
Funciones
Teatro El Tinglado
Mario Bravo 948
Teléfonos: 4863-1188
Web: http://www.teatroeltinglado.com.ar
Entrada: $ 2.500,00 - Domingo - 17:00 hs - Hasta el 30/04/2023
PARTICIPACIONES
Este espectáculo formó parte del evento: Ciclo- Más Teatro
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